Mi coche con matrícula Tenerife (TF)
Eran años que pensaba revivir la experiencia de mi viaje a Londres con la Fiat 500 durante mis días de joventud. Yo tenía 22 años y supuse que el idioma Inglés me serviría en el futuro para un buen trabajo. Mi amigo Emilio y yo, compramos un coche Fiat 500 de segunda mano después de haber trabajado muy duro para conseguir el dinero. Era blanco, con las puertas que se abren en sentido contrario. Salimos de mi pueblo en 4 personas en un día frio de invierno. Hacía mucho frío, pero el motor no nos traicionó. Despacio despacio, poco a poco subimos el paso del Monte Blanco, con mucha nieve a los lados de la carretera conseguimos pasar. Por fin cruzamos el paso a pesar de muchos coches más importantes del nuestro que quedaron atrapado por la nieve y el hielo. Europa se abrió ante nosotros en pocos días llegamos a la capital Inglés. Se dormia y se comía en el coche donde podiamos. Fue una experiencia fantástica. El Fiat 500, nuestra joventud, la desconsideración y un futuro para ganar.
Con esa idea en el cerebro y la emoción en mi corazón, me decidí a volver a vivir mi primer viaje a una nueva vida. Y entonces empecé a buscar un Fiat 500 para hacer frente a un viaje del que yo no había planeado nada. Primero el coche: el destino me lo planearia más tarde.
Me enteré de un privado que poseía un Fiat500. Através del vendedor- concesionario cerré el trato rápidamente. Yo estaba feliz, por fin tenia mi Fiat 500 clasica con la matricula de TF ! El resto de la historia está escrita en mis viajes. Historias de amigos inseparables como Lalo, el mecánico super experto que me ha enseñado los trucos del motor y resuelto muchos problemas durante el viaje desde la distancia.